La mayoría de las veces en las que surge dolor de pies suele ser por culpa de las ampollas, una afección bastante común y muy molesta. ¿A que en más de una ocasión has pegado el clásico esparadrapo en una de las heridas para intentar aliviar un poco la zona afectada? Sentimos decirte que, aunque evite del roce con el calzado, la protección es temporal y no resulta eficaz para curar la herida. En su lugar, te presentamos los siguientes remedios útiles para evitar y tratar las ampollas:
Te aconsejamos llevar siempre en la cartera los apósitos para ampollas grandes de Hansaplast. ¡Una vez que los pruebes no vas a querer utilizar otros! Este producto tiene una fuerte adhesión durante un mínimo de 48 horas, por lo que no tendrás que preocuparte ni llevar apósitos de sobra por si se desprenden de la herida; además, es un producto eficaz para los amantes del deporte, ya que, aparte de su adhesión extrafuerte, son impermeables al agua y resistentes al sudor. Podrás, por tanto, seguir disfrutando de tus actividades y entrenamientos sin preocupaciones. De todos modos, si solo tienes pequeñas ampollas en los dedos del pie, te recomendamos los apósitos para ampollas pequeñas.
No te darás cuenta de que lo llevas puesto. Gracias a su tecnología hidrocoloide y a su almohadilla de gel activo, los apósitos para ampollas de Hansaplast proporcionan un alivio del dolor y la presión desde el primer momento de su aplicación. Además, gracias a esta almohadilla, la herida estará siempre protegida de elementos externos como la suciedad, el sudor y las bacterias, evitando así la aparición de posibles infecciones. Además, uno des sus mayores beneficios es su capacidad para la cicatrización rápida mediante la curación húmeda.
La mejor manera para ganar esta batalla es disponer en todo momento de los apósitos para ampollas. Pueden aparecer en cualquier momento y lugar, por lo que te recomendamos que siempre lleves encima unas unidades de reserva.