Vivir la gran vida.
Por supuesto que a todas nos encanta un par de tacones. Sin embargo, por más divertido, femenino y elegante que sea vivir la "gran vida", hay algunos aspectos que son necesarios considerar si queremos que nuestros pies sigan confortables y sanos. Hansaplast ha reunido los mejores consejos, desde la compra hasta el uso, y algunas soluciones inteligentes para las adictas a los Manolos.
Consejos de supervivencia para las entusiastas de los tacones altos.
Mujer joven provándose unos zapatos de tacón alto.
Es conveniente comprar un tamaño algo grande. Debe permitir algún espacio adicional por si los pies se hinchan un poco. Es ideal comprar los zapatos a última hora de la tarde, que es cuando el pie ya se ha expandido un poco.
Para proteger los dedos de los pies, los talones o cualquier zona que pudiera experimentar fricción, especialmente en caso de tacones altos de aguja, aplícate Hansaplast Protector de rozaduras, que puedeN recortarse individualmente al tamaño correcto. Así descargarás la presión de las zonas afectadas. Asimismo, añadiendo almohadillado en la parte anterior de la planta del pie reducirá el malestar al caminar.
Conoce realmente cómo actúan estos tacones.
Los pasos vacilantes no son muy elegantes, y también suponen un riesgo de lesiones de tobillo.
Con tacones, una gran parte del peso descansa sobre las partes anteriores de las plantas de los pies, lo que significa que el acto de caminar exige un modo de andar completamente diferente y un movimiento diferente del que utilizaría al usar zapatos planos. Objetivo para un movimiento de talón y parte anterior de la planta del pie-dedos del pie: Talón y parte anterior de la planta del pie impactando contra el suelo al mismo tiempo.
Ajusta tu modo de andar: El uso de tacones te obligará a que tus pasos sean más largos de lo normal, lo que causará que se retrepe algo, en un movimiento gracioso que también te conferirá un mejor equilibrio.
Si eres una adicta de los tacones altos, se consciente de los riesgos. Con objeto de prevenir daños ortopédicos, decídete por un tacón menos alto. Incluso un poco menos puede marcar la diferencia (por ejemplo, un tacón de 5 cm causará menos problemas que otro de 8 cm).
Alterna tus zapatos con tacones altos. No uses siempre el mismo par de zapatos, especialmente si presiona sobre una zona específica del pie. Esto mantendrá los callos a raya.
Si ya se ha formado un callo en uno de los dedos de los pies, utiliza una de las soluciones inteligentes de Hansaplast. Un Apósito para callos afrontará el callo protegiendo al mismo tiempo tus pies frente a la presión posterior.
Divertido y bueno para tus pies: alterna tus zapatos con tacones altos.
Elije zapatos con tacones altos de puntera abierta (los llamados “zapatos sin puntera”) de vez en cuando: tus pies no estarán tan "encerrados".
Trata de reducir el tiempo de uso de los tacones altos, llevándote un repuesto de calzado en el coche o en el transporte público, para luego cambiarlos en el lugar, la función o el evento donde desees exhibirte llevando tacones altos. Recuerda, además: Cuando tus pies duelen, todo tu cuerpo duele.