¿Sabías que desde la planta de tu pie puedes ‘tocar’ todo tu cuerpo? Sí, porque las zonas reflejas en la planta de tu pie están conectadas y relacionadas con diferentes órganos del cuerpo humano. En este artículo descubrirás trucos y consejos prácticos sobre cómo estimular exactamente los puntos correctos durante un relajante masaje en las zonas reflejas del pie. ¡La mejor forma de conseguir un efecto beneficioso en tu cuerpo!
¿Qué es la reflexología podal?
¿De dónde viene la reflexología podal?
Los masajes en las zonas reflejas del pie tienen sus raíces en la tradición del Lejano Oriente, y también eran conocidos en el antiguo Egipto. No obstante, la forma particular de tratamiento para el dolor o la aplicación a nivel de relajación es más reciente, algo que se asocia con los nativos americanos.
En 1917, el médico estadounidense William Fitzgerald observó a los nativos usando este tipo de tratamiento y, como resultado, dividió el cuerpo en diez áreas a las que asignó las zonas reflejas en las plantas de los pies. Estas áreas fueron la piedra angular para futuras investigaciones y las subdivisiones más precisas de las zonas, hasta llegar a la terapia de zonas reflejas que conocemos hoy en día.
Estos masajes en las zonas reflejas del pie utilizan técnicas de masoterapia. ¿Cómo funcionan? Se asigna una región específica del cuerpo a cada punto reflejo en la planta del pie; pues los órganos del cuerpo, los grupos de músculos en la superficie de la piel y también del área subcutánea tienen relación con las zonas reflejas en las plantas de los pies.
El tratamiento con presión en la planta del pie es capaz de liberar tensiones y bloqueos; también estimula la circulación sanguínea y el sistema linfático, y fortalece el sistema inmunológico. Porque un masaje en las zonas reflejas de los pies no solo aporta relajación, también ayuda a un mejor funcionamiento del cuerpo.
Así funciona la reflexología podal
Los masajes en las zonas reflejas del pie son utilizados por terapeutas para aliviar enfermedades o dolores desde hace siglos: no supone trabajar para eliminar una perturbación, sino que sirven para apoyar y activar las fortalezas existentes. Eso sí, también puedes enfocar un masaje en los pies para conseguir mayor relajación, equilibrio y bienestar; si te lo haces tú mismo, recuerda prestar atención (o preguntar, incluso) dónde se encuentran los puntos de presión más agradables para tu cuerpo.
Cómo influye de manera positiva un masaje en las zonas reflejas del pie
La presión sobre las diferentes áreas de la planta del pie tiene multitud de efectos positivos en el cuerpo humano: además del alivio del dolor, también se pueden prevenir enfermedades o potenciar el proceso de curación. Por eso, ¿para qué ayuda la reflexología podal?
- Para liberar tensiones y bloqueos
- Para estimular la depuración y desintoxicación del organismo
- Para mejorar la circulación sanguínea
- Para estimular el sistema linfático
- Para fortalecer el sistema inmunológico y las propias defensas del organismo
- Para relejar el sistema nervioso
- Para armonizar la actividad de los diferentes órganos
- Instrucciones para la reflexología podal
Existe la opción de darte tú mismo un masaje en las zonas reflejas de los pies, pero también puede ser una buena opción hacerlo en pareja, ¿no crees? 😉 Para convertir la experiencia en algo más relejado y comunicativo.
Como consejo, recordad aplicar siempre una presión uniforme en todas las áreas; y probad si os sentís más cómodos con los movimientos tonificantes (rápidos, circulares, con caricias) o sedantes (presiones largas y firmes sin movimiento). O, por qué no, una mezcla de ambos tipos. Porque opciones hay para todos los gustos. ¿Y una recomendación?
Y, por último, recuerda que, antes de estimular los puntos de presión deseados en el pie, es importante comenzar activando las zonas reflejas de los órganos excretores, como los riñones o el hígado. Es un buen tip para que el masaje funcione en toda su plenitud.
En qué pueden ayudar los masajes en las zonas reflejas del pie
Para tratar resfriados
Debemos estimular la zona frontal y de los senos paranasales en las yemas de los dedos de los pies: al igual que ocurre en el tratamiento de un dolor de cabeza causado por un resfriado, presiona desde arriba y desde abajo al mismo tiempo, sin hacerlo directamente en las puntas de los dedos.
Para reducir los dolores de cabeza
La mejor forma de prevenir o aliviar un dolor de cabeza es masajear los “puntos de la cabeza” en los dedos de los pies: debes presionar desde ambos lados (superior e inferior) al mismo tiempo y de manera uniforme; también puedes mover los dedos como si estuvieras enraizando los dedos de los pies entre las yemas de los dedos de las manos.
Para aliviar los cólicos menstruales
Los masajes en las zonas reflejas del pie también pueden ayudar a relajar y aliviar los cólicos menstruales, reduciendo los síntomas rápidamente y calmando los calambres en el abdomen. En este caso, golpea desde el talón sobre el empeine exterior hasta la mitad del pie y aplica una presión uniforme en la zona del talón. También puedes masajear a lo largo del tendón de Aquiles: comienza ligeramente por encima de la parte externa e interna del tobillo y masajea a izquierda y derecha del tendón de Aquiles hasta el hueso del talón.
Para disminuir la tensión
La función más importante y conocida de un masaje de pies es la de liberar tensiones, contribuyendo al bienestar y a la relajación. La mejor forma de averiguar qué puntos funcionan mejor en tu caso es probarlos tú mismo: usa movimientos tónicos o sedantes, o una combinación de ambos, para encontrar los lugares que mejor sirvan para relajarte.
La técnica de la reflexología podal es fácil de aprender, pues hay numerosos tutoriales y guías de aplicación para encontrar y tratar los puntos de presión adecuado. E incluso, aunque no creas en los efectos curativos de la reflexología podal, ten por seguro que… ¡te proporcionará relajación y bienestar!
