Reductor de Cicatrices 21 uds

La formación de cicatrices forma parte del proceso de curación del tejido dañado. Tras una lesión, las heridas atraviesan distintas fases de curación.  El proceso de curación de la herida lleva finalmente a la fase de maduración, durante la cual el tejido de la cicatriz se reorganiza. Puede llevar años en función del tamaño y la profundidad de la herida original.

Los estudios clínicos han demostrado que el reductor de cicatrices Hansaplast es efectivo en caso de cicatrices hipertróficas con relieve y color o queloides. La cicatriz queda más plana, ligera y suave.  El reductor de cicatrices Hansaplast puede usarse en cicatrices nuevas y antiguas situadas en la cara o el cuerpo. 

Los parches reductores de cicatrices Hansaplast se elaboran con poliuretano, un material respetuoso con la piel, incluso con las pieles sensibles. Los productos fabricados con este material se han utilizado durante años en el cuidado profesional de las heridas. Los parches no contienen ingredientes activos (fármacos).

El tratamiento puede comenzarse en cuanto la herida se haya cerrado y curado por completo y después de que se hayan quitado los puntos de sutura en caso de intervención quirúrgica. Los estudios clínicos han mostrado resultados positivos tras 8 semanas de uso consecutivo durante al menos 12 horas al día. Los primeros resultados se perciben tras 3 o 4 semanas. El uso del parche durante más de 8 semanas podría mejorar aún más el aspecto de la cicatriz. Los resultados pueden variar en función de la persona y la cicatriz.

Quita el papel protector de la parte adhesiva del parche. Aplícalo sobre la piel limpia y seca y asegúrate de que cubra la herida por completo. Si la cicatriz no puede cubrirse por completo, pueden aplicarse varios parches unos junto a otros. El parche puede cortarse para ajustarse a las cicatrices más pequeñas. El tiempo de uso ideal es de 12 a 24 horas al día. Se recomienda cambiarlo a diario. También recomendamos cambiarlo cuando se ensucie o la adhesión sea insuficiente.

En caso de cicatrices grandes, puedes aplicar dos o más parches uno junto al otro. El parche puede cortarse para ajustarse a las cicatrices más pequeñas. 

Como ocurre con otros métodos de tratamiento, no es posible hacer que una cicatriz se vuelva invisible con el reductor de cicatrices Hansaplast. Sin embargo, se puede lograr una mejora significativa. 

Los parches son respetuosos con la piel y se han desarrollado especialmente para llevarse durante varias semanas consecutivas en la misma zona. Gracias a la suave tecnología de adhesión, cambiar los parches es totalmente indoloro. 

Las cicatrices recientes no deben exponerse al principio a temperaturas extremas. La luz solar intensa, el calor y el frío extremos pueden tener un efecto adverso sobre la formación de la cicatriz. Además, la ropa ajustada puede irritar el tejido de la cicatriz, por lo que debe evitarse. Asimismo, se recomienda precaución al realizar estiramientos, ya que la piel dañada es extremadamente sensible. 

El reductor de cicatrices Hansaplast puede usarse en marcas de cesárea si tienen relieve y color. No existen restricciones de uso para las mujeres en periodo de lactancia. Si tienes alguna pregunta, ponte en contacto con tu médico o farmacéutico.

El parche transparente de poliuretano se ha diseñado para crear una barrera semioclusiva que mejora la hidratación del tejido de la cicatriz. También incrementa la temperatura del tejido de la cicatriz. Así, se ayuda a activar el proceso de regeneración propio de la piel y se fomenta la remodelación de la cicatriz.

Si la piel se ha dañado, no se puede evitar la aparición de una cicatriz, pero se puede conseguir que sea menos visible. Puedes comenzar el tratamiento en cuanto finalice la curación de la herida. Con esto nos referimos a que la herida se haya cerrado por completo y los puntos de sutura se hayan quitado en caso de intervención quirúrgica.

El reductor de cicatrices no contiene ningún ingrediente que altere los colores. El enrojecimiento de una cicatriz indica la agitación de su tejido. El tratamiento con el reductor de cicatrices equilibra el proceso regenerativo, por lo que se reduce el enrojecimiento.